Resulta curioso por decirlo menos, que la mayoría de las desgracias que la humanidad ha padecido, se debe a obra y gracia del propio ser humano. Resulta obvio que los desastres naturales provocadas por la furia de la madre naturaleza, escapan a nuestro control; màs en el resto de infortunios como las guerras, las enfermedades endémicas, las hambrunas, la contaminación ambiental, etc; son responsabilidad absoluta del homo sapiens sapiens.
Ante el dolor y el sufrimiento de tanta gente en las antípodas, como por ejemplo la hambruna en Somalia o Etiopìa; la mayorìa de nosotros solemos responder que aunque sentimos pena por tanto sufrimiento ajeno, ello no es problema nuestro. Pensar que aquello no es problema nuestro es un gran error de apreciaciòn, asì lo demuestra fehacientemente la moderna Teoría del Caos; en donde la ciencia demuestran que somos parte de un todo y que cualquier daño en lo particular afecta necesariamente al todo.
Uno de los ejemplos más saltantes y aleccionadores de como el ser humano se autodestruye, està aun fresco en nuestra historia. Apenas 7 siglos han pasado desde que la peste bubónica, llamada Peste Negra, desolara a la humanidad de aquella època.
Fueron devastadoras las pandemias que asolaron Europa, principalmente la del siglo XIV que causò la muerte de una tercera parte de la población, alrededor del año 1348.
Demostrado está que la peste negra fue un brote de peste bubónica, una terrible enfermedad epidémica que ha azotado a la humanidad a lo largo de la historia. Esta enfermedad producìa brotes endèmicos desde inicios de la edad media, existen reportes històricos sobre la peste negra desde el siglo V y su persistencia hasta el XVI.
Tengo que especificar que la peste negra ya no se presenta como epidemias, mucho menos como pandemias que es la afectación de la enfermedad en más de un continente simultáneamente. Brotes de peste bubónica se siguen produciendo en ciertas zonas endémicas de África, Asia, Sudamérica; en la mayoría de los casos solo afectan a la población indígena. Sin ir muy lejos, tenemos que en la sierra norte del Perú muchos morían de peste bubónica hasta hace unas pocas décadas atrás.
La peste negra es causada por una microscópica bacteria llamada Yersinia pestis, estas bacterias viven dentro de la pulga Xenopsylla Cheopis. Asì tenemos que el minùsculo e irritante satarín es el vector para que la enfermedad se transmita al hombre; bien, ahora cerramos el círculo al mencionar que las pulgas parasitan y se alojan y viven en el pelaje de la rata negra (Rattus rattus).
La pulga en mención introduce miles de bacilos en la piel, que emigran a través de los vasos linfáticos hasta los ganglios linfáticos regionales, donde se multiplican causando la destrucción y necrosis (muerte de un tejido) de la estructura ganglionar. Los ganglios se inflaman y crecen dando lugar a adenopatías dolorosas dolorosa al tacto, denominadas BUBÓN ( esta es una palabra latina que significa ingle, de allí el nombre de peste bubónica), estos bubónes variaban de 1 a 10 cm. de diámetro y se localizaban generalmente en las regiones inguinal, axilar o en el cuello y pueden supurar.
Volvamos a la mayor pandemia de Peste Negra del siglo XIV. Esta comenzó quizá en algún lugar del asia central, y se propagó con el movimiento migratorio de la época; guerras, comercio, trata de personas, etc. Esta llega a Europa en 1348, La información sobre la mortalidad que causò varía ampliamente según las diversas fuentes; se estima que el 40% de la población de Europa murió desde el comienzo del brote a mitad del siglo XIV. Aproximadamente 25 millones de muertes tuvieron lugar sólo en Europa, junto a otros 30 a 40 millones en África y Asia. Algunas localidades fueron totalmente despobladas, con los pocos supervivientes huyendo y expandiendo la enfermedad aún más lejos.
Este levísimo paseo por la historia tiene como objetivo recordar que los terribles y demoledores efectos de la PESTE BUBÓNICA sobre la población de la época, no fue nada màs y nada menos que por el accionar activo o pasivo de los mismos pobladores de la época.
Obviamente ellos desconocian esto, caso contrario hubieran evitado lo que hicieron y que finalmente llevó sufrimiento y mortandad a sus propios hogares.
La peste negra o peste bubónica se presentaba cada cierto tiempo, causaba alta mortandad pero se autolimitaba. ¿Què pasò entonces en el siglo XIV, por qué se descontroló al punto de poner en jaque a la humanidad de entonces?
¿que fué lo que realmente pasó?
Aconteciò que en esos mismos años de la edad media, se produjo el clìmax de la histeria colectiva de acusar a las personas de tener pactos con el diablo y de practicar hechicerìas; lo que a nuestros tiempos ha llegado con el nombre de la Cacería de brujas. Una penosa època donde miles de mujeres ( y hombres tambièn ) fueron conducidas a la hoguera, donde fueron quemadas.
Hasta allí todo bien, nada debe extrañar la maldad del hombre.
"Bien", hasta que la turbamulta enfurecida buscando a los còmplices de los hechiceros, echaron ojo a un bello animal. Acusaron a unas bellas y ùtiles mascotas de tener pacto con el diablo, de ser el refugio para la reencarnaciòn del diablo y que desde sus cuerpos el deminio aconsejaba y dirigía a las brujas o hechiceras.
Entonces el vecino comùn y silvestre, para no mencionar a la iglesia y a la Santa Inquisiciònn, comezaron una cacería de los gatos. Acusaban a las pobres criaturas de ser parientes de satanás, criaturas del demonio, engendros del mal. Y tambièn los quemaron vivos, fueron tan sòrdidas acusaciones que les hicieron, que incluso se decìa que el demonio se encarnaban en ellos para copular con las brujas.
La historia de tanta salvajada prosigue que se eliminaron a los depredadores naturales de las ratas, al punto de la extinciòn. Ignorando que eran ellos quienes mantenìan en equilibrio a la poblaciòn de ratas; por consiguiente las ratas se multiplicaron descontroladamente.
Para tener una idea de la fecundidad de estos roedores, tenemos que se conoce que cada rata hembra puede parir hasta 10 ejemplares; en promedio son 5 ó 6 los que deposita la hembra en el interior de la madriguera o nido, se producen unos 5 partos por año con una vida media de 3 a 7 años. En promedio cada rata hembra va a generar unos 150 crìas por ciclo vital. Un crecimeinto exponencial fácil de calcular, máxima reproducciòn y sobrevida en ausencia del depredador natural.
La europa del medioevo pagó muy cara su ignorancia. Amèn de las horrorosas condiciones sanitarias de la època, se puede literalmente decir que la eliminaciòn de los gatos condicionò la superpoblaciòn de ratas y pulgas y bacteria gersinia pestis y muerte y màs muerte.
Es probable que cada sujeto que hubiera participado en la muerte de un ser humano acusado de brujerìa o de "sus còmplices felinos", durante esa febril psicosis colectiva del medioevo, hubiese sufrido pèrdidas mortales en su nùcleo familiar, o de su propia vida.
Deseo aclarar que la masacre de de los gatos no determinó la apariciòn de los brotes epidèmicos, por que ya se daban cada cierto tiempo; pero sí que fuè crucial para el descontrol de su propagación, la intensidad de la misma y la recurrencia de los brotes intensos que se sucedieron a lo largo de los dos siglos siguientes.
La moraleja de esta pàgina de la historia de la humanidad es que no debemos permanecer indiferentes ante el mal, pues segùn la Teorìa del Caos "el efecto mariposa" y los anales de nuestra historia; las consecuencias lo vamos a pagar todos nosotros y no solo lo que tiran las piedras o encienden la hogueras.
Arquìmedes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡anímate!, deja un comentario.