miércoles, 3 de agosto de 2011

MEDICINA ALTERNATIVA

La historia de la medicina es apasionada y si he de resumirla en un par de lineas es que es un TODO, no se puede dividir arbitrariamente ese TODO que vá desde la aplicación de chorros de leche materna sobre las heridas del asesino tigre dientes de sable con que intentaban las matriarcas del paleolítico intentaban curar las heridas de sus aguerridos cazadores, pasando por los salvajes aquelarres mágico-religiosos del neolítico, deteniendose un tanto en la medicina de los grandes sacerdotes egipcios con Imoteph cuya estela dio lugar siglos despúes al actual ícono de la medicina humana que presenta un sacerdote con una vara donde se enrrolla una serpiente y que fué conocido como Asclepios por los griegos y Esculapio por los romanos; siguiendo, tenemos la aparición de la fabulosa acupuntura en China y la orinoterapia en la India, las meditaciones instauradas en el Tíbet, el reiki desarrolado en el japón; arbitrariamente paso a la curaciones espirituales que se desarrolaron en la protoeuropa que antecede al auge del Eleusis unos 3000 años antes de cristo; paralelamente se produce el desarrolla la salubridad y medicina preventiva impulsada por el pueblo judío, después tenemos la imposición de manos en el año cero usado por Jesús; eso que estamos olvidándonos de la medicina aborigen de australia, la shamánica de la amazonía sudamericana, la medicina de los aztecas y de los incas; me salto los tiempos brutales de el medioevo que no hizo más que retroceder lo avanzado y doy un brinco a la era de la antibioticoterapia iniciada por la penicilina de Flemming y la teoría microbiana de Pasteur desarrolladas el siglo pasado, ya en los talones tenemos el descubrimiento del ADN, el proyecto genoma y la tecnología de la clonación, hasta llegar a la telemedicina, nanomedicina y la medicina robótica actual.
Este rápido e impreciso derrotero que corresponde a un rapidísimo esbozo de la ciencia médica nos muestra lo obvio: que la historia de la medicina no es otra cosa que la historia de la humanidad.
Debe entonces quedar claro que el vetusto tronco primigenio que constituye el proceso Salud-enfermedad se sostiene en antiquísimas raices, muchas de ellas soterradas en el olvido; sin embargo debemos tener en cuenta que estas raices son nada más ni nada menos que las medicinas denominadas complementarias. Medicinas complementarias creo que es mejor término que medicinas alternativas pues complementan a la medicima actual que es la que está en boga, complementan a la medicina científica que es la que yo uso y de la que también vivo, y la que obviamente es la mejor. Soy explícito pues existe gente que pretende negar lo evidente, pues tan solo se debe tener tres dedos de frente para saber que es de lejos la medicina contemporánea o alopática o de hospital u ortodoxa es la mejor; simplemente por que es la más evolucionada y se sustenta en las demás y en el desarrollo intelectual y científico de homo sapiens, es la flor hermosa que pende sobre el tronco.


Ahora toda la medicina, desde la moderna u ortodoxa (o alopática o la de hospital) como desees llamarla, hasta la cincuentena de medicinas complementarias son la misma cosa. Tan solo debemos saber que cada una de ellas tiene su lugar en el tiempo y espacio del pequeño resumen que acabo de hacer.

Asi, solo para poner unos ejemplos nada más, la hoy muy en boga quiropraxia era dominado desde hace mas de 5000 años por expertops hueseros y vendadores egpcios, aquellos que acomodaban luxofracturas a los construcctores de pirámides y no cobraban tanto como los de hoy en dia.
Otro ejemplo aún más palpable y que en los próximos dias desarrollaré es el boom actual de la espiritualidad, que no es más que un giro de tuerca de lo que sucedió en el Eleusis, Grecia, hace unos 2000 años. Ni hablar del milenario Yoga, los masajes, la herbolaria, .......toda, absolutamente toda la medicina complementaria es parte de nuestra medicina alopática, ortodoxa o de hospital. (como gustes llamarla)

Ahora, definitivamente existen y existiran situaciones donde una de las muchas medicinas complementarias serán mejor en un momento y para un paciente determinado, que la medicina actual cientifica y contemporánea. Definitivamente, si.

te daré un par de ejemplos ilustrativos: que usaríamos para un trayecto de 200 km de una ciudad a otra y tenemos premura en llegar, una bicicleta o un ferrari?, obviamente usaremos el logo del caballito ( esa es la medicina moderna). Pero no te asombrarías si en una atroz congestión en el corazón de Manhattan la bicicleta deje en ridículo al Ferrari en su cometido de desplazar a una persona de un lugar a otro. ( esa es la ventaja de la medicina complementaria, nos puede solucionar problemas de salud en casos puntuales donde la medicina moderna falla aún teniendo un Ferrari con un reluciente y potente y carísimo motor V12 DE 660 CV).

Otro ejemplo lo tomo de la película EL DIA DE LA INDEPENDENCIA, en aquel interesante filme, los extraterrestres que nos invaden y destruyen nuestros satélites logrando incomunicarnos, al destruir nuestros satélites la comunicación ultramoderna que poseemos se fué al tacho; en la película, que hicimos nosotros los humanos para salvar nuestra frágil existencia?: acudimos inteligentemente al obsoleto y ya en desuso sistema de telegrafía que increíblemente nos permitió comunicarnos con los demás humanos de todos los diversos continentes para coordinar el ataque al invasor luego de difundir donde tenían su punto débil.
Lindo ejemplo, verdad?, ilustrativo demás. En la actualidad todos acudimos en masa al internet y a las líneas telefónicas para comunicarnos, al igual que responsablemente acudimos a los servicos médicos hospitalarios; pero si el servicio moderno colapsa o tras reiteradas visitas a galenos y pruebas terapeúticas no nos soluciona el problema de salud, pues debemos el derecho de recordar que tenemos en un amplio arsenal terapeútico basado en nuestras antiquísmas medicinas que mantienen intacta su vigencia y su capacidad para complementar nuestra terapéutica y contribuir a reestablecer nuestra salud perdida.


Mañana te comento algo más, estas cosas hay que digerirlas de a poco.
Nos vemos hermano, nos vemos hermana.
Te envito a seguirme...

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