Si en estos momentos te encuentras sereno, tranquilo y sosegado, entonces el latido de tu corazón será sincrónico, pausado y rítmico.
Más si se presentase un evento que conlleve temor o miedo, tu frecuencia cardiaca se acelerará y entrarás en un estado de no ritmo o arritmia.
Tener miedo es normal, pero resulta que sus extremos son malos y su mantenimiento sostenido también.
Para ubicarte en lo que pretendo decirte, alli te va una parte de un poema que data de inicios del siglo XIX y que mal se atribuye al maravilloso Dr. Cristiaan Barnard el precursor de los transplantes cardiacos.
El éxito comienza con el pensamiento.
Si piensas que estás vencido, lo estás.
Si piensas que no te atreves, no lo harás.
Si piensas que te gustaría ganar pero no puedes, no lo lograrás.
Si piensas que perderás, ya has perdido.
Porque en el mundo encontrarás
que el éxito comienza con el pensamiento del hombre.
Todo está en el estado mental.
Bueno, como 1905 está muy lejos mejor nos acercamos mejor a un líder africano, Nelson Mandela, quien expresó lo siguiente:
NO ES VALIENTE EL QUE NO TIENE MIEDO, SINO EL QUE SABE CONQUISTARLO
Después de tan sabias palabras ya puedo decir que me voy a referir al miedo.
Este es una respuesta adaptativa, una emoción básica como a todos los mamíferos, su utilidad radica que nos prepara para una respuesta frente a una amenaza potencial.
Quiero decirte que el miedo produce en el organismo humano una serie de reacciones hormonales masivas que nos preparan para lo que está programado primariamente en nuestro inconsciente:
LA PRESERVACIÓN DE LA ESPECIE
En definitiva todos tenemos miedos, desde los temores que hemos ido almacenando a lo largo de la existencia, hasta aquellas predisposiciones que tenemos en nuestros ADNs, uhhhh!!!...debo recordar que no solo heredamos de nuestros ancestros el color de los ojos o la barbilla hundida, sino que también heredamos sus miedos atávicos.
Partiendo de la premisa básica que somos animales, debemos aceptar el hecho que tenemos un sistema cerebral primitivo o límbico o emocional o paleoencéfalo ( como gustes llamarlo) que apareció recién hace unos 300,000,000 (si, trescientos millones de años) al que recientemente se añadió la neocorteza que es la capa gris neuronal que contiene las áreas modernas de la inteligencia y el raciocinio.
Asi fuimos formados, primero asegurar la vida y luego lo demás.
Entonces, (y a veces lastimosamente), toda la información procesada por nuestros sentidos pasa primero por el cerebro primitivo antes que el moderno, por tanto se puede decir sin temor a equivocarnos que a cada instante estamos resolviendo problemas y acertijos del actual mundo globalizado WWW con el mismo bagaje emocional de hace 100,000 años.
Esto explica por qué ante el FACTOR MIEDO, la guerra esta pérdida como dice el primer poema de la introducción. Y nada o poco puede hacer un coeficiente intelectual de 200 ante el miedo, pues el comando COGNICIÓN, dimite en favor de los impulsos más primitivos.
Esta es una gran PARADOJA, pues estos impulsos permitieron nuestra supervivencia como especie y lo que antes nos hubiera salvado, hoy nos hace daño.
Resuniendo:
Anteriormente los miedos eran necesarios para captar amenazas potenciales para la supervivencia pues nos protegía de problemas reales, hoy lo siguen siendo; lástima que la mayoría de nuestros miedos actuales son irreales y potencialmente dañinos.
Una dosis de miedo indudablemente nos protege de los peligros de la vida, es un rasgo evolutivo y nos hace actuar de inmediato; y eso es bueno.
Pero el exceso de miedo o su cronicidad nos tulle emocionalmente, nos aniquila pues genera oleadas de ansiedad y angustia que nos tormna infelices y van a generar toda clase de enfermedaees reales como hipertensión, diabetes y las conocidas psicosómaticas y las mentales como neurosis y psicosis.
No me voy a cansar de recordarles que las hormonas del miedo, la adrenalina y el cortisol causan problemas cardiovasculares y glicemias sostenidas conocida nada más y nada menos que como diabetes.
Estos tiempos son tiempos de miedo, ahora le tememos casi atodo;
a perder el empleo, a destacar, a hablar en público, a la gente, al rechazo, a ser condenados, a equivocarnos, a fracasar, al ridículo, a tomar decisiones, a decepcionarnos, a no ser reconocido socialmente, a ser rechazado, al cambio, a un traslado, a pensamientos, a cosas que nunca ocurrirán.
!Mierda!, el miedo es el freno de muchas oportunidades, bien dosificado el miedo es util pues nos ayuda a ser prudentes, pero en exceso es malo; peor si se presenta en su máxima expresión, el pánico.
Tenemos que dominar nustros miedos por que estos influyen en nuestros PENSAMIENTOS y nuestros pensamientos influyen en nuestras conducta formando HÁBITOS, y los hábitos determinan nuestras ACCIONES, y nuestras acciones van a determinar la consecución de nuestros objetivos y por ende de nuestra calidad de vida.
Por tanto el miedo atenta contra nuestras vidas, envenena el talento, obliga a tomar medidas cortoplazistas y bloquean la visión de futuro.
¿Qué hacer ante el miedo?
Esa es la pregunta del millón.
Pues debemos reestructurarnos, conocernos más a nosotros mismos, incrementar la confianza y seguridad en uno mismo.
O sea ser más valientes, la valentía reestructura la percepción de las amenazas.
Está en nostros dominar nuestros miedos, revalorar las cosas, ver la realidad desde otro ángulo.
Ahora mismo donde te encuentres, colócate en medio de la habitación donde estás, primero de pie, mira todo alrededor y fija mentalmente las imágenes en un barrido de 360 grados.
Ahora colócate en cuchillas y has lo mismo, te vas a percatar de detalles y cosas que antes estaban fuera de tu alcancce de tu ángulo visual,¿ ves que en cuclillas tienes una visión diferente de un entorno que no ha cambiado nada pues eres tú el que ha modificado la perpectiva.
Lograr seguridad en uno mismo es lograr valentía, un proceso que debemos iniciar ya mismo por el respeto que nos debemos a nosotros mismo, porque debemos encontrae el sentido de nuestra existencia.
El tip de todo esto que te estoy comentando estriba en encontrar la MOTIVACIÓN que genere un cambio EN TU PERSONA.
Buscar una motivación que te genere alternativas concretas de cambio, te recomiendo usar el sentido del humor, de la ironía, ríete de ti mismo, riámosnos de nosotros mismos, busquemos nuestra propia felicidad.
Mi principal motivación: yo mismo, mi bienestar, mi propia felicidad.
¿Por qué tanto egocentrismo? Porque tan solo estando bien yo, puedo ayudar a los que me rodean y amo.
¿ Y el tuyo?
Espero que también seas tú.
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Arquimedes.
